lunes, 5 de diciembre de 2016

La Perfección de la Conciencia


Introducción

Un día, después de un satsang en una noche calurosa de agosto, recordando varias de las preguntas que la gente se hace acerca de su vida y de cómo vivirla; acerca de los muchos "peros", los "qué pasaría si" y los temores a los que se enfrentan, recibí la siguiente realización ― tomarme unos días de vacaciones y dejar que mi silencio escriba un pequeño libro sobre lo más esencial de nuestro corazón ― la perfección de la conciencia en la vida diaria teniendo en cuenta la diferencia entre el pensamiento y la conciencia.

La perfección de la conciencia tiene que ver con la presencia. La presencia no puede ser conocida de la manera que se conocen los objetos o la información, como algo fuera de nosotros mismos. Desde el punto de vista intelectual, es completamente desconocida. La paradoja es que, sin ninguna duda, ya la conocemos. De hecho, es la única cosa de la que estamos absolutamente seguros.

El problema con la mayoría de los buscadores es que quieren "obtenerla" como si fuera algo que tienen que alcanzar. Este mismo intento es el gran obstáculo que impide ver lo que ya es evidente. Estamos buscando algo que ya está aquí ― siempre aquí y ahora.

En este pequeño libro se te indica la dirección correcta y por medio de la comprensión de su mensaje descubrirás lo sagrado, la hermosa y radiante conciencia de la presencia en todas partes que mires.

La Perfección de la Conciencia (1ª Parte)

"Abandone la búsqueda de que acontezca algo y enamórese, enamórese íntimamente del don de la presencia en lo que es."
Tony Parsons

¿Alguna vez te has hecho estas preguntas?

- ¡Deseo tanto sentir la conciencia del Ahora, pero me resulta tan terriblemente difícil!
- Está bien hablar de hacer frente a los temores y problemas en un grupo de satsang, donde uno se siente seguro, pero es una historia diferente cuando uno está solo en el mundo y ante una situación amenazadora.
- ¿Hay algo que me estoy perdiendo cuando escucho toda esta charla espiritual, o simplemente no lo siento?
- He oído que la gracia llega inesperadamente ― ¿qué es la gracia y cómo podemos activarla?
- ¡Deseo tanto sentir la paz y la claridad en mi vida!
- ¡Sólo quiero sentirme vivo y no sentirme tan limitado y con miedo!
- No me siento completo, ¿me falta algo?
... ¡y cientos más!

Después de años de recibir preguntas de todo el mundo por correo electrónico, llega el reconocimiento de que la única confusión e incertidumbre que todos parecen tener gira en torno a la diferencia entre el pensamiento y la conciencia. Hay una gran diferencia entre ellos, como la noche y el día, y, sin embargo, paradójicamente, se complementan entre sí a través de la unidad de su naturaleza dual.

Lo que me quedó claro es que "conocer" la diferencia entre el pensamiento y la conciencia es lo que inclina la balanza hacia la claridad, la paz y la aceptación.

Estoy escribiendo esto con el calor de agosto durante mis vacaciones de dar satsang para ponerlo a disposición de cualquier persona que desee comprender. Puedo asegurarte que la comprensión de la diferencia entre la conciencia y el pensamiento, y ver su unidad complementaria, trae mucho más beneficio del que se pueda imaginar. Éstos son algunos de los beneficios de esta claridad:

Traerá claridad y es el paso más importante en la comprensión.

Ayudará a ver lo que es real en oposición a lo que es relativo e irreal.

Traerá paz porque el apego al pensamiento comienza a desvanecerse a través de la claridad.

Te sentirás más relajado, cómodo contigo mismo ya que el esfuerzo y la lucha prácticamente han disminuido.

Finalmente comprenderás lo que significa amarse a sí mismo y la cuestión de la autoestima quedará resuelta para siempre.

Los miedos empiezan a desaparecer por sí mismos al mismo tiempo que la claridad se establece.

Hay un tranquilo entusiasmo por la vida y de vivir con un corazón abierto al asombro.

La preocupación por uno mismo comienza a disminuir hasta que la auto-consciencia disminuye.

Cuando surgen preguntas, hay casi una visión inmediata de la respuesta incrustada en la propia pregunta.

Cuando surgen problemas no hay pánico ni incluso agitación porque la comprensión entre la conciencia y el pensamiento genera desapego.

El mundo es visto con nuevos ojos y se comienzan también a ver que no hay separación.

Todo intento de alcanzar, superar y corregir se desvanece como hojas en otoño.

Hay una sensación continua de liberación de la tensión y el estrés, incluso cuando se presentada en las actividades mundanas.

Hay compasión hacia los demás, porque no ves separación.

Hay una tranquila emoción interior por las cosas y las actividades ordinarias. Alguien ha comentado que incluso lavar los platos se convierte en una experiencia agradable.

Hay una increíble liberación de la esclavitud mental y del condicionamiento del sistema nervioso con la realización de lo que es el pensamiento.

Nuestro mayor miedo al vacío se convierte poco a poco en nuestra mayor alegría.

Finalmente nos despertamos a lo que es real y duradero.

Por encima de todo, descubrimos lo que somos y lo que siempre hemos sido.


El primer paso importante

(no hay nada que encontrar, salvo comprender lo que-es)


Cada vez hay más personas que aspiran a una vida más profunda y más significativa aparte del mundo devastado por la guerra en el que vivimos. Esta búsqueda, a pesar de que es una función natural del alma para llegar a sí misma, a menudo proyecta la creencia de que hay algo que encontrar. Esta creencia no es sólo un gran obstáculo para lograr una verdadera comprensión, sino que también se convierte en una adicción. Este obstáculo, la creencia de que hay algo que encontrar, puede tener una influencia tan grande en nuestra percepción egoica de la realidad que se convierte en la fuente de nuestra frustración, confusión y sufrimiento.

No hay absolutamente nada que encontrar, nada que superar, nada que arreglar, y definitivamente no hay necesidad de mejorar nada. Lo que queda es sólo la comprensión clara de lo-que-es aquí-ahora. Una vez que empezamos a despejar nuestra cabeza de nuestras nociones preconcebidas acerca de la espiritualidad, podemos empezar a MIRAR y ESCUCHAR el milagro de este momento. Lo que pensamos de este momento no tiene nada que ver con lo que es real y duradero. De hecho, cualquier pensamiento sobre cualquier cosa ¡es sólo un "pensamiento" sobre algo! ¿Te das cuenta?

Un pensamiento es siempre acerca de algo, nunca la cosa en sí. Podemos pensar, debatir y explorar el amor todo lo que queramos, pero sólo lo conocemos cuando lo saboreamos en el momento.

Probablemente has escuchado todo esto antes, pero ahora es tu oportunidad de asimilarlo. Incluso a medida que lees esto tu mente se está apoderando de ello. La mente (el pensamiento) es siempre "acerca de algo" y por lo tanto no puede experimentar ni captar directamente la verdad. He hablado con psicólogos, aspirantes a filósofos e intelectuales y ellos a menudo no lo comprenden porque se basan en la lógica intelectual. La verdad no es algo sobre lo que pensar o incluso hablar de ello. La verdad, la única verdad en la vida, es este momento aquí-ahora sin pasado ni futuro. La verdad está disponible para ti en este mismo momento si sólo puedes estar quieto el tiempo suficiente para sentirla. Ahora mientras lees esto, toma una respiración profunda y suspira profundamente, soltando toda la tensión física y los pensamientos. En tu quietud pregúntate "¿qué soy yo en este mismo momento?" y luego simplemente SIENTE. Todo lo que eres y siempre has sido es AHORA-CONCIENCIA. Esta Presencia es la verdad que todo el mundo ha estado buscando, desde el principio de la humanidad. Esta verdad es la única realidad que nunca muere, nunca cambia y nunca ha nacido ― "simplemente ES". Esta realidad se experimenta dentro de nosotros como amor incondicional, paz, claridad, unidad y alegría. Estos sentimientos NO son cualidades emocionales, de hecho no son cualidades en absoluto. Son nuestra verdadera naturaleza como presencia pura.

Si esta es tu primera experiencia de "mirar", se puede sentir miedo e incluso decepción porque el pensamiento de la mente exclamará: "¿es esto ELLO?" Los pensamientos condicionados de la mente son tan limitados que ven también el AHORA como limitado, sin darse cuenta en absoluto de que el AHORA es eterno y más allá del tiempo y el espacio. Es demasiado grande para que la mente lo conciba. A raíz de este descubrimiento inicial podría llegar el conocimiento de que tú no existes como creías, porque después de todo, si tú eres esta inmensidad de Ahora, ¿cómo podrías también ser una persona pequeña, limitada y frágil? Exactamente, no podrías serlo, a pesar de que la experiencia de ser el pequeño "tú" parece tan real. Esta presencia no pertenece a ninguna persona o individuo, ¡pero es TÚ! ¡Es lo que realmente eres!

Ahora que has tenido un pequeño atisbo de lo que significa la conciencia, vamos a explorar el "pensamiento" en el que la mayoría de la gente vive durante un 99,9% de sus días en la tierra.


¿Qué es el pensamiento?

En la Biblia se dice: "En el principio fue la Palabra, y la Palabra se hizo carne". Esta es una declaración poderosa y significativa. La "Palabra" se refiere al pensamiento o la mente, que se piensa a sí misma. El pensamiento es el vehículo por medio del cual imaginamos, percibimos, recordamos, retenemos y memorizamos, por nombrar algunos ejemplos. El pensamiento NO es la Realidad sino una impresión de realidad. Esta impresión es una imagen que, a menos que se vea simplemente como un pensamiento se convierte en la "realidad" para el perceptor. Esta llamada "realidad" crea movimiento en el estado reactivo conocido como e-moción (movimiento de energía). Por ejemplo, si has tenido una experiencia de niño de que algo te asustó, entonces cada vez que piensas en ella, tu cuerpo va a experimentar la misma sensación de miedo. El cuerpo tiene memoria celular basada en los pensamientos que han sido percibidos como reales.

En la vasta extensión de la Realidad nosotros atraemos y manifestamos nuestro estado vibracional. Si estamos vibrando en una situación de miedo, ira o culpabilidad, atraemos y manifestamos las personas y las circunstancias que están vibrando en el miedo, la ira y la culpa. Esta es la ley universal de atracción, del mismo modo, si estamos vibrando en una situación de alegría y amor también manifestamos nuestro equivalente. Si conoces a una gran cantidad de personas que están a menudo quejándose o enojadas entonces tienes que mirar tu diálogo interior (patrón de pensamiento.) Si ves que la gente está siendo agradable contigo, entonces eso es lo que estás manifestando a través de tus vibraciones. No existe el bien o el mal en el mundo, lo cual es difícil de entender para la mayoría de la gente. En verdad, sólo es el pensamiento el que lo hace así, como escribió Shakespeare, "No existe nada bueno ni malo; es el pensamiento humano el que lo hace aparecer así".


Todo es pensamiento (mente)

Aquí hay una gran verdad ― todo lo que ves, y para el caso, todo en el universo, emana de tu mente. Trata de sentir la realidad de esta declaración increíble pero cierta. No tienes que pensar en ello, simplemente observa cuánto eres controlado por tus pensamientos. Cada sensación que tienes comienza como un pensamiento, que se convierte en una sensación sólo cuando no se ve como tal. A menudo confundimos el pensamiento con nuestro corazón o intuición cuando en realidad comenzó como un sutil miedo o duda que sólo después se convirtió en una fuerte sensación. Cualquier individuo "despierto" te dirá que todo lo que ves que parece real en el mundo ―los animales, gusanos, minerales, vegetales, tu cuerpo― todo es una manifestación de tu mente Esto puede parecer difícil de aceptar al principio, pero si sigues leyendo manteniendo tu corazón abierto, te darás cuenta de la verdad que hay en ello. Si te relajas y empiezas a mirar en el corazón de la quietud, comenzarás a tener una comprensión más profunda de que lo que "conoces" es pensamiento apareciendo como el mundo.

Es como ver la televisión y quedarte inmerso en el espectáculo hasta el punto que te identificas completamente con el personaje de la historia. En el momento de verlo, el espectáculo parece real y nos lleva a una respuesta emocional, sin embargo, es sólo un juego de la mente. Recuerdo muchas veces que me he involucrado emocionalmente con películas que fueron realizadas hace tanto tiempo que la mayoría de los actores han muerto hace tiempo, y sin embargo, parecía muy real mientras la estaba viendo. El poder sugestivo del pensamiento es el poder más fuerte del mundo.

La mayor parte de los sentimientos que tenemos NO son reales, simplemente porque emergen del pensamiento (imaginación). De hecho, la mayoría de la gente confunde la realidad con su propio pensamiento. La mayoría ha perdido la capacidad de sentir con su corazón y como resultado experimentan un inmenso sufrimiento emocional.

El cuerpo es una ilustración magnífica y poderosa de la potencia inmensa y asombrosa del pensamiento que se manifiesta en la realidad aparente. La forma del cuerpo humano evolucionó hasta su estado actual a través de miles de millones de años de evolución (la Palabra hecha carne).

Cuando te refieres a tu cuerpo, ¿qué es lo que dices? ¿No dices "mi cuerpo"? Alguna vez te has preguntado, "¿Quién es este 'mi' al que me estoy refiriendo?" Dices "es mío", como si te perteneciera. Sin embargo, ¿quién lo posee? Este es un ejemplo de cómo confundimos el pensamiento con la conciencia. En primer lugar necesitas de la conciencia sólo para ver y sentir el cuerpo; y al decir "es mío", queda claro (para un espectador objetivo) que tú NO eres el cuerpo, sino algo que crees que te pertenece.


http://www.advaitainfo.com/articulos/perfeccion-conciencia1.html

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